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Más allá del fútbol: cómo el Mundial 2026 transformará el comercio presencial

Escrito por Kushki | Nov 3, 2025 4:18:16 PM

El Mundial 2026 no solo será un evento deportivo histórico; también representará un punto de inflexión en el comportamiento de consumo y en la forma en que las personas pagan en los comercios físicos. Con México, Estados Unidos y Canadá como países sede, se espera un flujo sin precedentes de visitantes internacionales, lo que transformará la manera en que se realizan las transacciones en los comercios físicos. 

En este contexto, los comercios físicos —desde tiendas, restaurantes, hoteles, hasta bares y centros de entretenimiento— enfrentan una pregunta clave: ¿están preparados para atender a consumidores que esperan experiencias de pago modernas, rápidas y sin efectivo? 

Según el Worldpay Global Payments Report 2024, los pagos digitales (digital wallets, A2A, BNPL) pasaron de representar apenas el 3 % del valor de las transacciones presenciales en 2014, a aproximadamente 38 % en 2024. 

El efecto de esta transformación no es exclusivo de las grandes economías. En América Latina, países como Brasil, Chile y México están experimentando un crecimiento acelerado en la adopción de pagos digitales, impulsado por el turismo, la inclusión financiera y la modernización tecnológica del comercio minorista. 

Este avance prepara el terreno para lo que podría convertirse en una de las mayores transformaciones del comercio presencial mexicano: la llegada del Mundial 2026 como catalizador de la economía sin efectivo.

Qué es un pago con tarjeta presente y cómo funciona en la economía actual 

En la era de la digitalización, los pagos con tarjeta presente siguen siendo la base del comercio presencial en todo el mundo. Este término se refiere a las transacciones en las que la tarjeta física —de débito, crédito o prepago— está en el mismo lugar que la terminal de punto de venta (POS) que procesa el cobro. 

A diferencia de los pagos en línea, donde los datos se introducen manualmente o de forma remota, el pago con tarjeta presente implica una validación física e inmediata del medio de pago, lo que reduce los riesgos de fraude y mejora la confianza entre cliente y comercio. 

En este tipo de transacción, el proceso ocurre en segundos: 

  1. El cliente inserta, desliza o acerca su tarjeta (o dispositivo móvil) a la terminal POS. 2. El sistema valida la información, se comunica con el emisor y autoriza el pago. 3. Finalmente, la terminal POS confirma la operación en tiempo real. 

La evolución tecnológica ha permitido que este proceso sea cada vez más rápido y seguro. Gracias a la tokenización —que sustituye los datos sensibles de la tarjeta por identificadores cifrados—, hoy es posible pagar con dispositivos móviles, relojes inteligentes o tarjetas contactless, sin comprometer la seguridad.

Pero no todos los pagos presenciales son iguales. Cada tecnología ofrece distintos niveles de seguridad, velocidad y aceptación global.

Métodos de pago presenciales:tecnologías, ventajas y tendencias globales 

Los pagos presenciales han evolucionado de manera acelerada en la última década. Lo que antes era un proceso mecánico y limitado —deslizar una tarjeta o entregar efectivo—, hoy es una experiencia digital, segura y casi instantánea. En la actualidad, los principales medios de pago en punto de venta físico cuentan con distintos niveles de seguridad, velocidad y adopción global: 

Pagos contactless (sin contacto): rapidez y confianza en un solo movimiento 

Las tarjetas con tecnología NFC (Near Field Communication) permiten pagar solo con acercarlas a la terminal, sin contacto físico. Este método combina velocidad, seguridad y comodidad, y se ha convertido en el preferido de los consumidores globales. 

Datos clave: 

  • En Europa, 53.8% de los pagos con tarjeta en tienda ya son contactless
  • En Reino Unido, 85% de las personas usa contactless mensualmente; ~60% de los pagos con tarjeta son sin contacto. 
  • Un pago contactless tarda ~10–15 s, menos que chip/efectivo. 
  • El mercado global contactless: USD 34.6 mil M (2021) 164.1 mil M (2030)

Adopción por país: 

Reino Unido: 

El 85 % de la población realizó pagos sin contacto al menos una vez al mes en 2023, y cerca del 60 % de todas las transacciones con tarjeta se procesaron de esta forma. 

Australia: 

Los pagos sin contacto representan aproximadamente el 95 % de las transacciones con tarjeta en persona, convirtiendo al país en una de las economías más cashless del mundo. 

Canadá: 

En 2023 representaron cerca del 63 % de todas las transacciones en tienda, tras un crecimiento anual del 17 %, según Fintech Frontiers Live (2024). 

Estados Unidos: 

Los pagos contactless mantienen un crecimiento sostenido impulsado por la adopción masiva de tarjetas NFC y billeteras digitales; las principales redes estiman que más del 50 % de las transacciones presenciales ya se realizan sin contacto.

Latinoamérica: 

La adopción avanza con fuerza gracias a la bancarización y a la digitalización del comercio. Brasil y México lideran la región, y los analistas proyectan un crecimiento de doble dígito anual en la emisión de tarjetas y terminales compatibles con tecnología contactless durante los próximos tres años. 

Billeteras digitales: el futuro de los pagos presenciales 

Las billeteras o wallets digitales —como Apple Pay, Google Wallet o Samsung Pay— permiten pagar con dispositivos móviles o wearables mediante tecnología NFC o tokenización. Estos pagos eliminan la necesidad de portar una tarjeta física y ofrecen la mayor seguridad del mercado, ya que los datos nunca se almacenan ni se comparten directamente con el comercio. 

Datos destacados: 

  • En el UK Finance Payment Markets Report 2024 se reporta que el 57 % de los adultos en Reino Unido usó billeteras digitales móviles (como Apple Pay o Google Pay) en 2024, cifra que subió desde 42 % en 2023. 
  • En México, según el informe Mexico: 2024 analysis of payments and ecommerce trends de Payments CMI, las billeteras digitales están proyectadas para representar 17 % del total de transacciones en POS en 2027

En conjunto, estos métodos marcan una transición clara: el comercio presencial se está moviendo hacia la experiencia sin contacto y sin fricción, donde el tiempo de espera y el riesgo de error son prácticamente nulos. 

De la fricción a la fluidez: por qué los consumidores buscan experiencias de pago más ágiles 

El concepto de “pago sin fricción” se ha vuelto central en la experiencia del cliente. El Baymard Institute estima que el 70 % de las compras se pierden por procesos de pago largos o poco intuitivos. En sectores como retail o entretenimiento, donde la decisión de compra ocurre en segundos, la agilidad del cobro puede ser la diferencia entre concretar o perder una venta. 

Las principales fuentes de fricción en los pagos presenciales son: 

  • Filas largas o esperas innecesarias. 
  • Tener que repetir el monto o introducir datos manualmente. 
  • Rechazos de pago por fallas técnicas o incompatibilidad. 
  • No aceptar el método preferido del cliente (tarjeta, contactless o wallet digital). 

Estas situaciones no sólo generan frustración; también afectan la percepción de eficiencia y modernidad del comercio. Los consumidores asocian los pagos lentos con procesos anticuados y, en muchos casos, optan por negocios con terminales más actualizadas.

El Mundial 2026 será un ejemplo perfecto de esta dinámica: millones de visitantes internacionales, con poco tiempo y altas expectativas, buscarán pagar sin complicaciones. En eventos de gran afluencia, la capacidad de cobrar de forma ágil no solo mejora la experiencia, sino que también aumenta la rotación y los ingresos por hora de operación

Diversas investigaciones coinciden en que los pagos sin contacto reducen de forma significativa los tiempos de transacción y mejoran la percepción del cliente en el punto de venta. En promedio, los comercios que adoptan esta tecnología pueden procesar operaciones hasta un 30 % más rápido y reportan mayores niveles de satisfacción entre sus usuarios. 

Según CoinLaw (Contactless Payment Statistics 2025), el 78 % de los pequeños negocios que implementaron pagos contactless en 2023 observaron una mejora notable en la experiencia de sus clientes. 

Pero más allá del proceso, la evolución de los pagos también tiene un impacto directo en las ventas y en la reputación del negocio.

Cuando decir “solo efectivo” cuesta caro: el impacto de no ofrecer métodos de pago digitales 

La digitalización avanza a ritmo acelerado, así que depender únicamente del efectivo puede convertirse en un freno para el crecimiento de cualquier negocio físico. 

Un informe de Mastercard indica que el 56 % de las PYME en Latinoamérica que aún no aceptan pagos digitales reportan haber perdido clientes semanalmente por esa razón. En mercados con alto flujo turístico o de entretenimiento, ese impacto puede multiplicarse durante eventos masivos como el Mundial 2026

Las principales consecuencias para los comercios que solo operan con efectivo son: 

  1. Pérdida directa de ventas 

Si un cliente no puede pagar con su método preferido, simplemente elige otro comercio. Durante periodos de alta demanda, como un partido o evento deportivo, cada minuto de espera o negativa de pago puede representar docenas de transacciones perdidas

  1. Percepción negativa y pérdida de confianza 

Un negocio que no acepta tarjeta o wallet proyecta una imagen desactualizada. Esto afecta especialmente a los visitantes internacionales, que asumen que todos los comercios aceptan medios electrónicos. 

  1. Mayores costos operativos 

El manejo exclusivo de efectivo implica riesgos adicionales: errores humanos, costos de transporte de valores, conciliaciones manuales y exposición al robo o pérdida. Además, reduce la visibilidad de las ventas diarias y dificulta la planeación financiera.

  1. Desventaja competitiva frente a economías más digitalizadas 

En el panorama internacional, los pagos con tarjeta dominan claramente el punto de venta. En países como Reino Unido, el efectivo representa solo alrededor del 12 % de todas las transacciones presenciales, mientras que las operaciones con tarjeta —principalmente contactless— superan el 80 % del total, según Payments Cards & Mobile (2023). En Australia, la digitalización es aún más marcada: prácticamente todos los pagos en tienda se realizan mediante tarjetas o medios electrónicos. 

En contraste, México continúa mostrando una alta dependencia del efectivo, que todavía participa en aproximadamente el 32 % del mercado de pagos de acuerdo con Mordor Intelligence (2024). 

Esta diferencia refleja la brecha que aún existe entre las economías con infraestructura de cobro plenamente digital y aquellas que están en proceso de modernización, pero también señala la oportunidad de crecimiento para el mercado mexicano. 

¿Qué tan preparado está el comercio mexicano para reducir su dependencia del efectivo y adaptarse a los nuevos hábitos de pago?

México frente al cambio: evolución del uso de efectivo y crecimiento de los pagos digitales 

El INEGI destaca que el número de establecimientos con terminales o infraestructura tecnológica para aceptar pagos electrónicos ha crecido de forma sostenida desde 2018, impulsado por la bancarización, el acceso a internet y el aumento del comercio formal. 

En América Latina, el uso de tarjetas se consolida como el principal motor de esta transformación. De acuerdo con Mastercard (2023), cerca del 63 % de los consumidores en la región utiliza tarjetas de débito como su método de pago habitual, y el uso de crédito continúa en expansión, especialmente en entornos urbanos y comercios formales. 

Los expertos coinciden en que esta transición no será inmediata, pero sí inevitable. Las nuevas generaciones —digitales por naturaleza— y el impulso de eventos de gran escala como el Mundial 2026 acelerarán la adopción de terminales modernas, pagos sin contacto y wallets digitales en comercios físicos de todo tipo.

El panorama global de los pagos presenciales: menos efectivo, más tecnología 

Aunque el ritmo de adopción varía según la región, la dirección es la misma: los pagos electrónicos y sin contacto reemplazan progresivamente al efectivo como forma predominante de transacción presencial. 

A nivel global, la cuota del efectivo en las transacciones presenciales ha descendido de forma significativa.

  • De acuerdo con Worldpay, el efectivo representa alrededor del 16 % del valor total de pagos en tienda física.  
  • En economías como el Reino Unido, el uso del efectivo ha descendido a alrededor del 12 % de todas las transacciones presenciales en 2023
  • En Australia, el efectivo representa solo cerca del 13 % de las operaciones en tiendas físicas según los últimos datos del Reserve Bank of Australia. 
  • En Canadá, los reportes indican que el efectivo representa aproximadamente 11 % del valor de las transacciones presenciales

En América Latina, el panorama de pagos presenciales muestra avances, aunque con variaciones por país. En Brasil, por ejemplo, el efectivo representa solo el 22 % del valor de las transacciones, lo que refleja una fuerte adopción de métodos digitales como Pix. En Asia, la transformación es aún más decidida: en Japón, la tasa de pagos “cashless” alcanzó el 42.8 % en 2024, superando la meta oficial del 40 %.

Conclusión: hacia un México preparado para un Mundial sin efectivo 

El Mundial 2026 será mucho más que una fiesta deportiva: será la oportunidad para que México demuestre que también lidera en innovación y experiencia de pago. 

La evolución de los pagos presenciales es parte de una transformación más amplia: la de una economía que busca ser más eficiente, trazable y segura. La adopción de terminales modernas, pagos contactless y billeteras digitales no responde únicamente a una tendencia tecnológica, sino a una necesidad de competitividad y adaptación al consumidor contemporáneo. 

Para los comercios físicos, esto implica mirar más allá de la inmediatez de la venta y considerar el papel estratégico de la experiencia de pago dentro de la satisfacción del cliente. Cada transacción cuenta: no solo como ingreso, sino como punto de contacto con un consumidor cada vez más informado, global y digital. 

En los próximos años, los países sede del Mundial —México, Estados Unidos y Canadá— marcarán la pauta de lo que podría ser el estándar de comercio presencial del futuro: rápido, conectado y sin efectivo. 

La pregunta no es si esta transición ocurrirá, sino qué tan preparados estarán los comercios para aprovecharla. 

Y en ese sentido, México tiene todo para convertirse en un referente regional en la adopción de pagos digitales y en la creación de experiencias presenciales más fluidas, seguras y universales.